Aguas de baño: Saint-Palais-sur-Mer “prevé” posibles cierres preventivos

La Ciudad ha desarrollado con la Universidad de Burdeos un modelo llamado "predictivo", basado en varios datos estadísticos, para afinar sus decisiones sobre las prohibiciones de baño.
La calidad de las aguas de baño (CBA) es un tema candente en Saint-Palais-sur-Mer, no por su mala calidad, sino por los cierres preventivos debido a las condiciones meteorológicas adversas. Las tormentas de verano y las lluvias resultantes se encuentran entre las más comunes.
El municipio, que cuenta con la certificación "Enfoque de Calidad de las Aguas de Baño" desde 2013, debe someterse a una auditoría de seguimiento anual. El 10 de julio de 2025, la ciudad recibió la renovación de esta certificación. Cabe recordar que esta certificación, creada por el Ministerio de Medio Ambiente, avala una rigurosa metodología de seguimiento para proteger la salud de los bañistas. Esta certificación se aplica a las playas de Bureau, Platin, Grande Côte, Combots y Nauzan, compartidas con el municipio de Vaux-sur-Mer.
De cinco a ocho cierres en veranoAnte la impopularidad de los cierres preventivos, a menudo malinterpretados tanto por residentes como por turistas, el municipio de Saint-Palais ha adoptado un modelo predictivo basado en estadísticas. Stéphane Magrenon, teniente de alcalde encargado de la calidad de las aguas de baño, contactó en 2023 con estadísticos profesionales de la Universidad de Burdeos para crear esta herramienta adaptada específicamente a Saint-Palais-sur-Mer, y más concretamente a la playa de Bureau, la más afectada por estos cierres.
“Nuestro deseo es encontrar un equilibrio entre tomar riesgos y no tomarlos”.
La normativa de la etiqueta establece que si llueve 5 mm en una hora u 8 mm en veinticuatro horas, la playa debe cerrarse como medida de precaución para garantizar la seguridad sanitaria. Por ello, se ordenan entre cinco y ocho cierres preventivos cada verano. Sin embargo, el municipio se ha dado cuenta de que podría ser posible ajustar mejor estos cierres, ya que algunos análisis no han concluido que los resultados sean incompatibles con la seguridad sanitaria.
Un sistema binarioAlimentada por una base de datos creada en 2017 que incluye diversos parámetros como la hora de las mareas, sus coeficientes, sus alturas, la cantidad de lluvia en D-1 y D-2, y la afluencia de público, la herramienta predictiva ofrece dos posibilidades: 0, sin riesgo; 1, con riesgo. La temporada de verano de 2024 sirvió de prueba y nos permitió "hacer pruebas", afirma Stéphane Magrenon. "Es una herramienta para la toma de decisiones. Si llueve 9 mm en veinticuatro horas, la normativa recomienda el cierre preventivo. Gracias a la herramienta predictiva y a sus datos estadísticos, la información mostrada confirma nuestra decisión de cerrar la playa si el riesgo está comprobado o de abrirla si el riesgo no es significativo. La fiabilidad se estima en un 95 %. Nuestro objetivo es, obviamente, reducir el número de cierres preventivos y encontrar un equilibrio entre asumir riesgos o no, garantizando al mismo tiempo la seguridad de los bañistas".
Si bien en julio no se produjo un cierre preventivo, ya que el cierre del 21 de julio se debió a un mal resultado, las estadísticas indican que en agosto podría haber una mayor probabilidad de que se produzca. Se planea una prueba a gran escala.
SudOuest